domingo, 22 de abril de 2018

Debates variopintos.

¡Hola holita, Miguelitos!


¿Cómo os encontráis? Esperamos que estupendamente y ¡bienvenidos al blog una semana más! Nosotras estamos bien, gracias por preguntar. Algo cansadas, ¿pero cuándo no lo estamos? y alguna de nosotras (Camino), pobre cuitada*, ya está comenzando a sentir los primeros síntomas de la alergia. Que se joda (la vida del alérgico es muy dura e incomprendida). Otras de nosotras (Marina) sufren de una alergia esporádica no identificable y no nota el cambio de estación ya que su alergia, caprichosa como ninguna, surge en distintas épocas, con distintos climas y bajo distintas circunstancias. Que se joda también (Ojalá supiera a qué coño soy alérgica). (Nos hacemos mucho bullying a nosotras mismas en este blog, ¿no?).


Bueno, pues hoy nosotras queremos traer un tag-debate-algo que no sabemos muy bien cómo nombrar pero que nos apetece mucho hacer porque es algo que tenemos apuntado en nuestra lista de entradas para el blog (¡tenemos una! ¿A que somos responsables y adultas y guays? … después leéis las temáticas de las que hablamos y toda esa nube de adulta responsabilidad se desvanece en el aire, pero hasta ese momento sí parecemos super chachis). ¡En fin!

Básicamente esto bien podría llamarse «tag: ¿qué prefieres?» o «tag: ¿esto o lo otro?»… pero esos son nombres muy cutres y feos y queremos ponerle otro. Debates variopintos nos parece tan buen nombre como cualquiera, así que… ¡adjudicado! Ah, y para variar vamos a cambiar el orden de nuestras respuestas, que siempre va Camino delante (el alfabeto es lo que tiene) y ahora le toca a Marina. ¡Allá vamos!


¿Puntitos (comúnmente conocido como sopa maravilla o lluvia) o fideos?

Marina: los fideos están bien, pero mi voto va a ir siempre a los puntitos. Siempre. Aquí hay una guerra importante en ciernes con mi padre, al que el encantan los fideos y, claro, esto no sería un problema si no fuera él el que cocina. Así que, él cocina, él decide. Y diréis «En tu casa, tú cocinas. ¡Haz puntitos!» y tendréis razón, pero yo nunca llegaré a la excelencia culinaria que es la sopa de mi padre (y toda su cocina) y con esa bazofia que me sale a mí no hay quién disfrute de los puntitos.

Camino: ¡fideos! Amo los fideos. En mi casa siempre se hace de puntitos (o de estrellas, o de cualquier otra pijada) y estoy hasta las narices. ¡Yo soy una persona simple! ¡Me gustan los fideos! ¡Larga vida a los fideos! Además, son más divertidos. Porque yo lo digo. Cuando viva sola (algún día, algún día lo conseguiré) me cebaré a fideos como si no hubiera un mañana.

¿Voldemort, Sauron o Darth Vader?

Marina: soy muy fan de los tres, pero tengo debilidad por Darth Vader. No sé si es porque me gusta más su evolución, sus actos, su historia, su construcción como personaje, su coherencia o porque me gusta mucho más Star Wars que El Señor de los Anillos y Harry Potter. Así que, sí, mi voto es para lord Vader.

Camino: Darth Vader. No es por faltar al respeto a los demás, pero Voldemort y Sauron fueron vencidos con facilidad relativa mientras que Darth Vader, aunque llegó un momento en que era más máquina que ser humano, logró dominar (junto al emperador) toda la galaxia. Si eso no es un ejemplo de superación, no sé qué lo será. Además, tiene la Fuerza. Y su redención (que no derrota) por volver al lado de la luz es preciosa. Los demás quedan algo cutres a su lado.

Tortilla de patatas ¿con o sin cebolla?

Marina: esta pregunta es absurda. La tortilla sin cebolla no es tortilla, es patata con huevo cuajado. Puestos a quitarle cosas a la tortilla de patata quitémosle también la patata y el huevo y así podemos comernos un rico plato de NADA. ¡Porque prefiero comer NADA a comer algo que no sea tortilla de patata con cebolla! (Y, por supuesto, poco cuajada. Con salmonelosis, como le decimos en mi casa. Babosilla para mí, por favor).

Camino: para mí aquí no hay pregunta posible. La tortilla de patatas lleva cebolla o no es. Vengo de una familia de amantes de la cebolla dentro y fuera de la tortilla y puedo asegurar con conocimiento de causa que una tortilla de patatas sin cebolla no sabe igual. Igual de bien, está claro. Es como que le falta algo. Le falta el alma, el salero, la alegría. Además, entrando en otro debate… tortilla poco cuajada.

Pizza ¿con piña o sin piña?

Marina: voy aquí a romper una lanza en favor de la pizza con piña ya que, aunque es una aberración apocalíptica que creó algún desalmado misántropo con la intención de atentar contra la humanidad, conozco a un par de personas razonables a las que les gusta. Y si bien el hecho de que les guste tendría que hacerme dudar de su cordura, me caen lo suficiente bien como para no dejar de ser su amiga, por mucho que el hecho de que les guste esa monstruosidad sea argumento suficiente para jubilarles de la vida. Lo que soy yo, me desagrada la piña sola, juntarla con pizza no mejora la experiencia.

Camino: de nuevo, una pregunta que puedo responder con facilidad. Sin piña. Me gusta la pizza. Me gusta la piña. Su mezcla no. El sabor es extraño. Añade demasiado jugo a la pizza y la textura de la piña al horno es… ugh. No. Sin piña. Con queso.

Cumpleaños feliz ¿«te deseamos todos» o «te deseamos, *inserte nombre del cumpleañero*»?

Marina: yo soy de esas que se quedan calladas a la espera de ver qué dicen los demás para cantar lo que ellos canten y así no quedar mal. Aun así yo soy partidaria del «te deseamos todos» porque las distintas longitudes de los nombres pueden alterar el ritmo de la canción (imagina un «te deseamos, Nabucodonosor». Eso no hay quien lo cante) y las distintas formas de llamar a una misma persona pueden descoordinar la canción. Por eso yo dictamino, ante la duda «te deseamos todos».

Camino: esta es una buena pregunta y no sé bien qué responder. Por lo general siempre me tiro hacia el «te deseamos todos» o su variante, «te deseo yo misma» (porque ahora canto felicitaciones de cumpleaños individuales. Es difícil juntarnos en grupo, ¿vale? Todos estamos muy ocupados), pero alguna vez sí que he cambiado de bando sin querer.


Lo verde del roscón ¿fruta de verdad o complot del gobierno?

Marina: confieso, me como la fruta del roscón. Sí, Miguelitos, soy de ese tipo repugnante de gente a la que le gusta la fruta escarchada. ¡Está rica! En mi defensa diré que además tiene un nombre bonito, escarchada. Eso sí, no tengo ni idea de que es la fruta verde. Identifico la mayoría de las frutas, pero esa no sé si quiero saberlo. En serio. Soy más feliz en la ignorancia.

Camino: leí en alguna parte que en realidad es calabaza teñida. Y la calabaza, me dice Internet, («Ambas, frutas y verduras, provienen de plantas pero mientras las frutas o frutos son los “ovarios” que contienen las semillas, las verduras son tomadas de cualquier otra parte de la planta. De este modo el jitomate, el aguacate, el pepino, la calabaza, el pimiento, el chile y la berenjena son frutas») es una fruta (técnicamente el tomate también, cosa que me confunde profundamente). Aún así, a mí esta explicación no me convence (además, ¿por qué calabaza? ¿Por qué no manzana, o kiwi? El kiwi tiene incluso más sentido, ¡ya es verde!) y abogo por el complot del gobierno. Y también creo que es un complot del gobierno que todavía le pongan al roscón fruta escarchada. Qué asco. ¡Si la mayoría se la quitamos! Solo los viejos y los raritos (como yo) disfrutan de esa cosa. No es por ofender, es así.


¿Jesús (Cristo, el Mesías, el hijo de Dios) cagaba o no cagaba?
Si os preguntáis si se nos ha ido la pelota con esta pregunta, es probable pero no somos las únicas. Estudiamos en Antropología de la religión que esta cuestión se trató realmente en un Concilio celebrado por la Iglesia. O sea, es una pregunta muy seria, porque determinaba si era o no un dios de verdad. (Teniendo en cuenta únicamente la religión cristiana). Y creemos recordar que no se llegó a una conclusión.

Marina: la pregunta es, ¿el hecho de que Jesús cagara ponía su divinidad en cuestión? Creo que alguien se habría dado cuenta si el Mesías no se tomaba sus pausas de asuntos propios en sus discursos y se retiraba a hacer sus necesidades. Es algo que llama la atención, alguien habría dicho algo. Aunque también es probable que silenciaran esas voces de alarma ante su anomalía para que no fuera apedreado por rarito (más aún) y una vez se proclamó como hijo de Dios (con toda la modestia del mundo), fue una de «aaah, ahora todo encaja». Pero sí, cagaba, fijo. Quidicir, comía, ¿no? Por algún lado tendría que salir todo ese pan y ese vino.

Camino: ¡yo digo que sí! Al menos, si comía, y La Biblia dice que comía, ¡tenía que cagar! Todo lo que entra tiene que salir por alguna parte, de modo que cagaba. Fijo. Quiero decir… es que por muy dios que fuera (si tenemos en cuenta la religión cristiana y no otra más, por que el resto solo le mencionan como profeta), estaba encarnado en un cuerpo mortal. Los cuerpos mortales cagan, viene implícito. Si no cagas, te mueres. Y Jesús se murió, sí, pero a los treinta y pico y porque le clavaron en una cruz, y parecía gozar de muy buena salud hasta el momento, así que ¡já! ¡Cagaba!

¿Tortitas o crêpes/filloas?

Marina: difícil decisión. Me encantan las tortitas, me comería 100 de una sentada, pero me gustan tantísimo las crêpes y las filloas. Taaaan deliciosas. TAAAAN RICAS. Y versátiles. Las tortitas se limitan a un postre, pero las crêpes y las filloas puedes acompañarlas de tantísimas cosas que pueden ser desayuno, comida, merienda y cena, primer plato, segundo y postre. Todo un recurso culinario.

Camino: hm. HMMMM. Buena esta. Teniendo en cuenta que tengo familia gallega, y que casi noto sus respiraciones amenazadoras en mi nuca mientras trato de decidir qué prefiero… filloas. Las puedes rellenar de cualquier cosas o comerlas solas, como te apetezca. Y además, al ser más finas, puedes embaular muchas más filloas de lo que podrías con las tortitas, más gruesas y grasientas… ¡y puedes hacerlas saladas! Win-win.

¿Taburete o paralelepípedo?

Marina: taburete. Quidicir, paralelepípedo tiene mucha musicalidad, pero me confunde y a veces añado o quito «le's» que no van ahí. Taburete es graciosa y da como golpecitos. Me guzzzta.

Camino: taburete. Rueda y resuena en la lengua como un chasquido suave. Es la palabra perfecta. (Aunque la resonancia de paralelepípedo es magnífica, hay que reconocerlo. Pero taburete… ay, es tan relajante. Repetid conmigo: taburete, taburete, taburete).

¿Helado cremoso o polo de hielo?

Marina: según la situación. Si es por el simple placer de disfrutar del helado, cremoso. Si es porque me muero fuerte de calor, polo. Soy simple como el mecanismo de un botijo. Además los sabores tienen que ser diferentes. El polo siempre tiene que ser de limón, el cremoso puede variar más: de yogur y frutos del bosque, mandarina, fresa, frambuesa, etcétera.

Camino: supongo que depende del momento del verano o del hambre que tenga, pero por lo general suelo gravitar más hacia los helados cremosos por mucho que disfrute de un buen polo de limón. Qué puedo decir, el helado de maracuyá con albahaca (helado que solo me gusta a mí, al parecer) está demasiado bueno. (En serio, tenéis que probarlo: si vivís en Madrid id a la heladería Sienna, lo tienen allí y está delicioso. Not sponsored).

¿Helado o batido?

Marina: batido. Creo que soy más de batidos que de otra cosa. Destacando entre mis preferencias, el de fresa del Tommy Mels y prácticamente todos del Juicy Avenue. Excepto si el helado es Extreme de limón. Porque Extreme de limón. ¿He hablado ya del crimen imperdonable de haber quitado esa maravilla del mercado? ¡HEREJÍA! ¡DRAMA! AGONY! ¡JALAPEÑOS!

Camino: helado sin duda alguna. De hecho, si me dieran a escoger entre helado y cualquier otra cosa, casi siempre ganaría el helado. Me encanta el helado, me aseguro de comerlo mucho y en cualquier época y me hace muy feliz. De hecho, en el trabajo el año pasado trajeron helado SOLO PARA MÍ. Porque saben lo mucho que me gusta. Hm…

¿Disney, Pixar o Dreamworks (antes de que se convirtieran en uno)?

Marina: esta pregunta es cruel porque yo amo toda la animación infantil con geniales canciones y tengo películas favoritas en todas las productoras, y personajes favoritos y todo muy genial. Aún así, teniendo en cuenta que mi película favorita de todos los tiempos es Alicia en el País de las Maravillas de Disney, voy a tener que decantarme por el ratón de grandes orejas. Pero, en serio, El Dorado, Toy Story, Shrek, Buscando a Nemo…

Camino: solo por Toy Story valoraría mucho decir Pixar, y solo por La ruta hacia El Dorado valoraría mucho decir Dreamworks, pero Disney, porque amo absolutamente todas sus películas en conjunto (quitando las nuevas que están echando en Disney Channel. ¿Qué pollas es eso de Descendants? Menuda película más cutre). Aunque claro, ahora que todo es una gran compañía ya no hay por qué elegir… *guiño, guiño*.

Y la temida. ¿Marvel o D.C?

Marina: aquí hay que matizar algunas cosas. Los superhéroes masculinos me gustan más los de Marvel. Respecto a los superhéroes femeninos no estoy segura porque Wonder Woman, pero Tormenta (aunque en la primera película tiene la PEOR frase de chulería de la historia: «¿Sabes lo que le pasa a un sapo cuando le alcanza un rayo? Exactamente lo mismo que a cualquiera». SERIOUSLY, MARVEL. SERIOUSLY???? ¡Menuda puta mierda! ¡Tormenta se merece algo mejor! Si no me creéis, pinchad aquí). Los villanos me gustan más los de D.C. La ambientación también (quidicir, Gotham. Es una ciudad tan oscura y truculenta, casi burtoniana y yo amo el estilo de Burton). Los ships y los poderes me gustan más en Marvel (especialmente los ships, que me dan la vida). En resumen, en líneas generales es Marvel mi ganador, pero de D.C tengo que destacar a Wonder Woman, Gotham y a todos los malos de Batman.

Camino: hablando exclusivamente de películas (porque no he leído los suficientes tebeos de las dos compañías como para decidir en este caso), voy a decir que Marvel. D.C está remontando mogollón con pelis como La liga de la justicia o Wonder Woman, pero esas dos son las únicas que yo personalmente he disfrutado de verdad. El resto me aburren (excepto las de Superman clásicas, esas me molan. Pero son del año de la pera, así que no cuentan). Marvel, en cambio, no me ha aburrido con ninguna película. Y tiene a Lobezno y al Profesor X.


¡Y ya ta'! Aunque podríamos estar aquí eternamente porque cualquier cosa es susceptible de ser considerada debate. Solo tienes que decir bien alto «¡Esto es genial!» y pegar una patada al suelo para que aparezcan un puñado de personas gritando «¡Eso es mentira, so marrana, y te voy a decir por qué!». Y así la vida seguirá su curso normal (ah, la vida. Los pajaritos cantan, las nubes se levantan, los troles vienen a discutir…).

Debatir amistosamente siempre es sano y defender efusiva y emocionadamente las cosas que te gustan es incluso terapéutico (A mi estado anímico le hace maravillas). Y a lo tonto puedes encontrar a gente que piensa como tú y terminar fangirleando conjuntamente. Ya sabéis, las cosas claras, el chocolate espeso, la tortilla con cebolla y la pizza sin piña.

Con mucho amor y brillis brillis
Camino y Marina

*Cuitado/a: afligido, desventurado. Pringado, vamos.

1 comentario:

  1. ¡Hola!
    Hahaha no saben cuanto ame este tag y cuántos términos tuve que googlear ¿En serio sopa de puntitos? No tenía idea de que existiera por lo tanto SIEMPRE FIEL A LOS FIDEOS y en cuanto a la pizza... por favor... la pizza con piña es uno de los mejores inventos. #Sorrynotsorry.
    Besos.

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