domingo, 1 de mayo de 2016

Receta para vagos #5: El arte de sodomizar a un pollo con un limón.

¡Hola holita, Miguelitos!

Si esta escena fuera realista Ariel llevaría un moño cutre, una sudadera tres tallas más grande y las gafas en la punta de la nariz. Todos lo sabemos.
¿Qué tal va todo? ¿Bien? ¿Genial? ¿Estupendísimo? ¿Fatal, como a nosotras? Ya sabéis, cosas del puto jodido maldito cabron hijo de perra T.F.G. A Camino y a Marina, por lo menos, les está creando una hermosa úlcera y no les deja dormir porque van un poco bastante como el culo y se acerca la fecha de entrega. Problemas del primer mundo. (¡Problemas muy jodidos! ¡Mi tutora me ha llamado inútil, prácticamente! Mi autoestima está por los suelos. Estoy por hacerme maquilladora. Marina y yo hasta tenemos un plan B por si esto de la carrera no sale...) (Un plan B que como la cosa siga así se convertirá en el plan A en breves...).


Hoy queremos hablaros de sodomización. ¡Esperad, esperad, no os vayáis! Nos referimos (como sospechamos que podéis ver por el título) del magnífico arte de sodomizar un pollo con un limón, lo que resulta en una deliciosa comida si sabes realizarlo bien (Supongo que si sois veganos no tendréis interés en esta receta) (¿En serio? ¿Veganos? ¿Por qué? ¿Y el queso? ¿Es que nadie piensa en el queso?). Eso sí, rezad porque los pollos no se rebelen algún día porque en ese caso estamos perdidos y acabaremos todos con el culo como la bandera de Japón y aromatizada con limón fatal. (Supongo que si sois veganos los pollos no se rebelarán contra vosotros... suertudos) (¿Suertudos? ¿Y el queso? ¿¡Y EL QUESO!?). Y es que aquí tenemos, en primicia para vosotros, con mucho amor (y un horno)... ¡la siguiente receta para vagos!

Nunca es suficiente queso. NUNCA.
Y es para vagos, entre otras cosas, porque casi todo lo hace el horno, lo que es un plus. Además os deja muchos minutos libres para que los invirtáis en el arte de hacer el gusanito en la cama o la gamba en el suelo, nosotras no somos quienes para meternos en vuestras formas de pasar el tiempo. De hecho si queréis invertir en hobbies podéis hacerlo, es una receta permisiva.

Dejamos de hablar para ofreceros esta... *redoble de tambor* ¡SUPER RECETA  DE POLLO SODOMIZADO!


INGREDIENTES
Un pollo listo para ser sodomizado (es decir, limpio y con el culo abierto).
Una patata grande.
Una cebolla.
Un limón.
Medio vaso de vino blanco.
Aceite.
Sal.
Pimienta.

PROCEDIMIENTO
1. Corte en rodajas la patata y la cebolla.
2. Precaliente el horno a 220º por arriba y abajo.
3. Hágase con una fuente para horno donde quepa ampliamente despatarrado el pollo (En plan "píntame como a una de tus chicas francesas").
4. Cubra la base de la fuente con las patatas y la cebolla troceada, salpimente y rocíe sensual y despreocupadamente un poco de aceite sobre ellas.
5. Acuchille salvajemente el limón sodomizador con un cuchillo (Para que el acto sea más realista piense en él como su tutora de T.F.G) y córtele los culos para que libere bien su fragancia. (Pero qué mal suena esto).
6. Introduzca el limón sodomizador debidamente acuchillado en el culo bien abierto del pollo. Una vez el pollo haya sido sodomizado debidamente, ciérrele el culo, ya sea atándolo o presionando con las manos, hasta que sea seguro que el limón sodomizador no se vaya a salir.
7. Embadurne al pollo debidamente sodomizado con sal, pimienta y aceite. (Darle al pollo un suave y sensual masaje con sal, pimienta y aceite [mantequilla para aquellos que deseen más deliciosidad] descarga tensiones a tope. Garantizado).
8. Colóquelo en la fuente encima de la capa de patatas y cebolla. 
9. Rocíelo con el vino blanco al gusto y bébase otro vaso de vino a la salud del pollo que va a cocinar. (No demasiado, no sea borrachín) (Hagalo al más puro estilo Huevopoeta). (Hay otra versión que no incluye vino blanco ni cebolla, para aquellos que deseen variedad. Es exactamente igual, pero queda sin tanto juguillo. También muy rico).
10. Introduzca la fuente con todo el preparado en el horno. Cuidado con las quemaduras. (Use manoplas si posee).
11. Espere entre 30 y 45 minutos antes de sacarlo y darle la vuelta al pollo sodomizado.
12. Vuelva a introducirlo otros 30 minutos.
14. Cambie el modo del horno a gratinar si es que quiere que la piel se tueste y déjelo otros 5 minutos.
15. Apague el horno.
16. Sáquelo (de nuevo, cuidado con las quemaduras).
17. Sirva en un plato una ración de patatas, cebolla y pollo sodomizado.
18. Disfrute.
Mira qué bueno estoy... disfrútame... estoy delicioso... mira mi contoneo sensual...
Como podéis ver, sodomizar a un pollo es rápido, fácil y sano (para ti, no para el pollo), y además queda un rico rico plato con cuyas sobras puedes hacer además otros platos como ensalada de pollo, croquetas de pollo... Y ya, porque se nos ha acabado la inspiración de platos derivados de pollo. ¿Sopa de brick a la que le has echado cachitos de pollo? (Seguro que está rico). Además, al pollo le gusta ser sodomizado. Mirad qué feliz baila en el gif de arriba. Si no le gustara no bailaría feliz. (EL GIF DEL POLLO BAILARÍN DEL SKYPEEEE, ¡MIRA, MARINA, MIRA!) (¡EL GIF DEL POLLO BAILARÍN DEL SKYPEEEEE! ¡LO VEO, CAMINO, LO VEO!).

En fin, mis queridos Miguelitos. Esperamos que llevéis a cabo esta receta, la améis y la adoréis y le deis muchos besitos al pollo para que el trauma de ser sodomizado no lo sea tanto. ¡Y aquí os dejamos! Esperando que seáis muy felices y comáis perdices ¡POLLO!

Con mucho amor y brillis brillis
Camino y Marina.

1 comentario:

  1. Post oficialmente leído por Almu, que piensa que sois muy crueles y no tiene intención de ir metiendo limones en los años ajenos. (¿ES QUE NADIE PIENSA EN LOS POLLOS?)

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